30 de Abril

Llegar al último día del cuarto mes, es una chingonada, en especial, si tienes entre 3 a 10 años, de seguro te espera una fiesta en la escuela, donde habra caramelos, piñata, sodas, pastel y en tu casa un juguete más para madrear.

En mi caso, era de regla que me obsequiarán o más bien nunca fallaban alguno de estos tres, un libro de asterix, el clásico ¿Dónde esta wally?-

ó los preciados playmobil (de los cuales no me queda ninguno, ni vivo, ni muerto cómo el periodista), en fin, este es un buen día para recordar las chingaderas que complementaron nuestra infancia, familia, amigos, amigas, videojuegos, televisión juguetes, películas y demás. Feliz Día, voy a ver la serie del Conde Patula, la cual en esos y estos días es lo único chingon de la programación de Canal 12.

La importancia de un cumpleaños

Hace algunos días, no muchos, fue mi cumpleaños, mil gracias a los que llamaron, mandaron correo o acudieron a dar el abrazo, los llevo adentro de mi corazón cabrones, eso me hace pensar la pinche falta de huevos para felicitar a toda la gente que ha cumplido o celebrado algo especial, y que, ha falta de tiempo, o, verguenza, ocio, pendejez, entre otras cuestiones, he dejado de saludar.

Gracias a todos lo cabrones que han rodeado mi vida; desde la familia, pasando por la calle, la primaria, secundaria (buenos tiempos), preparatoria y la universidad.

Soy un hombre sumamente agradecido, chidos y nos vemos en nuestros más profundos y precarios sueños.

Lo único que les dejo si tienen tiempo es que busquen y disfruten dos canciones de Portishead
Wandering Star y Sour Times, no tienen madre.

En la segunda, cuando llegue el coro Nobody Loves Me Is True, (no hay pedo yo los quiero y un chingo; cuidense viejos.)

(Saca el vodka TE TOCA, ya sabes quien SOS, no te hagas CORALCARAZA.)